martes, 31 de julio de 2012

EL DECRETAZO


El pasado mes de abril los cuatro sindicatos con representación en el Comité de Empresa repartieron un escrito instando a todos los trabajadores a votar SI al preacuerdo de Convenio Colectivo y al Plan de Viabilidad. Vamos a recordar algunos de los argumentos que ofrecían de manera insistente para convencer a la plantilla:
      “El mantenimiento del carácter publico, del empleo y las condiciones laborales y sociales están garantizados con este preacuerdo, (…), dotándonos de herramientas que nos permitirán por un lado eludir los ataques que seguro continuaran llegando por parte de los poderes políticos (…).”
      “Estamos convencidos de que este preacuerdo nos dará a todos la estabilidad necesaria para afrontar el futuro con mayores garantías (…).”
      “Con el SI podremos decidir y moldear el futuro de todos”. “Con el SI conoceremos el camino que nos queda por recorrer”.
           
Todo esto ha saltado por los aires con el tristemente famoso Real Decreto-ley 20/2012 y la Ley 2/2012 de Presupuestos General del Estado aprobados por el Gobierno conservador de España. ¿De qué garantías, estabilidad, futuro, certezas, caminos conocidos hablaban? Al final toda era retórica barata, fuegos artificiales para envolver una claudicación sindical pancista sin precedentes, sin lucha alguna (el preacuerdo de convenio contenía duros recortes salariales, pero suculentos avances en disponibilidad de horas sindicales para los firmantes del mismo). No podría ser otro el broche final del peor mandato de un Comité de Empresa que se recuerda en la noche de los tiempos.

         Por otra parte, desde UGT acusamos al Gobierno conservador de tener un programa económico contrario a los intereses generales de los ciudadanos. De adoptar medidas (apoyadas sin matices por el nuevo presidente del PP andaluz)  que conducen a la ruina a nuestro país y que profundizan en la crisis, tal y como constatan los datos y las previsiones macroeconómicas a la baja que ha vuelto a establecer el propio Gobierno. Y es que la reducción y eliminación de todo lo público parece ser el único objetivo que el Gobierno tiene claro. Un camino equivocado que nos conduce al precipicio de la recesión, que será más prolongada, con mayor destrucción de empleo y supondrá la ruptura de la cohesión social. Empobreciendo a la clase media no se sale de ninguna crisis. Reduciendo las prestaciones por desempleo no se incentiva la búsqueda de empleo, como mantiene la doctrina económica liberal, porque los millones de personas paradas no son vagos que rechazan constantemente las ofertas de trabajo que llegan a casa.

Entre los poquísimos beneficiados los empresarios, con una reforma laboral que ha supuesto un rompimiento total de los delicados equilibrios de poder en las relaciones laborales entres trabajadores y empresarios, volcando casi todo el poder a favor de estos últimos. Dándose en la práctica una preocupante generalización de los chantajes, abusos, amenazas, acosos e injusticias legales contra indefensos trabajadores, y con frecuencia de forma independiente de la evolución de los resultados económicos de la empresa.

El pasado 25 de julio se celebró una cumbre social en Madrid convocada por UGT y CCOO, con cerca de 200 colectivos (CGT, Asociación de Jueces para la Democracia, Unión Progresista de Fiscales, Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda, Ecologista en Acción, FACUA, CEAPA, etc.), acordándose una Declaración que muy resumidamente propone lo siguiente:

EL 15 DE SEPTIEMBRE CENTENARES DE MILES DE CIUDADANOS Y CIUDADANAS MARCHARÁN A MADRID DESDE TODOS LOS RINCONES DE LA GEOGRAFÍA ESPAÑOLA PARA DECIR NO A TANTA INJUSTICIA. De inmediato emplazaremos al Gobierno a que no prolongue ni profundice una política tan ineficaz como injusta y convoque un referéndum para que la ciudadanía se pronuncie sobre las medidas aprobadas. Si no lo hiciera, seremos las organizaciones de la Cumbre Social las que llevemos a cabo la convocatoria de una CONSULTA POPULAR y con el resultado de la misma actuar en consecuencia.