Hace tiempo que llegan a la sección sindical de UGT reiteradas quejas de varios compañeros sobre la actitud inadecuada de un responsable de la sección de Limpieza y Repostado, en el sentido de tratar con dureza y abuso de autoridad a los trabajadores adscritos a dicha sección. El último incidente ha ocurrido hace pocas semanas, cuando se dirigió a un trabajador de forma intempestiva, a gritos, con palabras malsonantes y desprecio.
Es una cuestión obvia que ningún responsable de la empresa, a la hora de realizar sus legítimas funciones de organización del trabajo y dirección de grupos humanos, debe faltar al debido respeto. En pleno siglo XXI hay que recordar una vez más que los trabajadores son seres humanos, aunque algunos estén empeñados en que no lo sean, y como tales tienen derecho a la integridad moral, sin que, en ningún caso, puedan ser sometidos a tratos degradantes. Esta exigencia de respeto a su dignidad está además recogida en todo el ordenamiento jurídico español, comenzado por la propia Constitución y siguiendo por el Estatuto de los Trabajadores.
Todo lo anterior lo hemos puesto en conocimiento de la Dirección de la Empresa , con la finalidad de que tome las medidas oportunas para que hechos de esta naturaleza no vuelvan a repetirse. Ahora también lo ponemos en conocimiento de todos los trabajadores, porque estamos convencidos de que estas actitudes despóticas deben ser conocidas para reprobación moral y general de la plantilla.
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